Si hay algo que no entiendo es la manía que tienen las madres de tomarse el café después de haber sacado a los niños del colegio.
Los niños pequeños entiéndase, de unos 6 a 8 o incluso 10 años.
La situación suele ser algo así:
Las madres llegan al bar de turno se ientan en uan mesa en grupos de cuatro o cinco, a los niños les sientan en otra mesa, para que no molesten. Piden una consumición, en este caso café (para tranquilizarse con los niños supongo), y a los niños les sacan los bocadillos y luego los yogures. En la mayoría de los casos no llevan cucharas, las piden en el bar y los restos (yogures vacios, papel de aluminiol, etc) lo dejan sobre la mesa que han utilizado los niños.
Ahora se supone que ambos (madres y niños) han terminado la merienda, pero toca el relax. Las madres se quedan hablando y sin ninguna preocupación por los niños les dejan libremente jugar por ahí, molestando al resto de clientes del establecimiento e incluso al propio camarero.
Estas son las madres cafeteras.
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