El debate del Estado de la “nación” de la semana pasada ha sido la constatación más evidente de la situación en la que actualmente se hallan el Partido Socialista Obrero Español y el presidente Rodríguez Zapatero. La situación del Estado es –aunque no se quiera reconocer ni reflejar en los medios de comunicación- de triple crisis, económica, política e institucional.
Y pese a la gravedad de la misma, Rz. Zapatero es incapaz de establecer una alianza estable con ninguno de los grupos de la Cámara de los Diputados. Con el PP, salvo en lo relativo a la reforma de la ley de Cajas y la Energía, los puentes están rotos, y todas sus relaciones tienen como único punto de interés el día de las próximas Elecciones Generales. Parece mentira pero es así, ésta es hoy su mutua preocupación. Con el bloque de izquierdas se acabó el idilio tras el giro copernicano de Rz.Zapatero del pasado día 12 de mayo con el “Plan de Ajuste” que se vio instado a imponer. Con CiU no hay posibilidad de acuerdo tras el fiasco del proceso de Nuevo Estatut, laminado por dos veces desde Madrid. Todo ello es en este momento.
Nuestra actitud ha sido constructiva y de mano tendida. Queremos propiciar un acuerdo estratégico. Sí, un acuerdo estratégico –que no ser tabla de salvación- que dé respuesta a las necesidades de Euskadi y que ayude a superar el impasse al que se ha conducido al autogobierno vasco.
Aunque tampoco se quiera atender en el discurso público de dónde venimos, cuál es el contexto –no sólo económico- político-institucional en Euskadi y en el Estado, quien tiene que saber cuál es la reflexión de EAJ-PNV ya la conoce así como su permanente disposición constructiva. Insisto, primero en dar respuesta a las necesidades de Euskadi.
Hemos presentado 15 propuestas.
Las 8 primeras están recogidas literalmente del Estatuto de Gernika aprobado por el Pueblo vasco de la C.A.Euskadi hace más de 30 años y todavía hoy incumplido. Su cumplimiento es ley. No haría falta ni proponerlo pero la realidad incontestable de los hechos es que no hay una voluntad política de cumplimiento estatutario, ni siquiera durante estos últimos 15 meses con Gobierno monocolor socialista tanto en Euskadi como en España.
Reclamamos, por lo tanto, el cumplimiento del Estatuto con carácter urgente porque estas transferencias nos van a permitir responder mejor a la situación de crisis económica que padecemos.
Las siguientes 4 propuestas hacen referencia a necesidades acuciantes de la situación socio-económica vasca que necesitan respuestas y compromisos específicos y urgentes: la incentivación del sector de la máquina-herramienta, el compromiso real con la fuente de neutrones por espalación, la proporcionalidad territorial en la acogida de menores extranjeros o el traspaso de los terrenos de Araka para darles un nuevo uso.
Hemos presentado 2 propuestas que recogen también el espíritu estatutario, como son la oficialidad de la denominación de los territorios históricos en euskera o el reconocimiento de las selecciones deportivas vascas.
Y, por fin, hemos presentado una propuesta para un nuevo marco jurídico-político para Euskadi. Es una propuesta bien conocida por el PSOE y también por el PSE. No puede decir el PSOE que le suene a desconocida y que tampoco la haya tratado hasta ahora. Y el PSE y el Lehendakari López conocen el sentir de todo ello porque se lo presenté personalmente en nuestra reunión del pasado día 29 de enero. El problema es que su respuesta ha sido la habitual: no hay respuesta.
¿López vigilante?
La actitud del Lehendakari López ante este paquete de propuestas ha sido, nuevamente, descorazonadora. Afirma que “va a estar vigilante”. Y nuestra pregunta es, ¿vigilante ante qué?, ¿ante el compromiso que EAJ-PNV pudiere “arrancar” del PSOE para el cumplimiento estatutario, de una vez por todas y tras un debate del Estado de la Nación, cuando han transcurrido ya casi seis meses desde que le emplazara a tal compromiso a él y no ha contestado?
López y el PSE, junto con PP y UPyD, han declarado fiesta oficial el día del Estatuto, pero es incapaz de cumplirlo o de hacerlo cumplir. Se han acabado las excusas. Lleva más de un año en Ajuria Enea y –pese a haberlo anunciado hasta por tres veces- no se ha producido ni un solo traspaso, no se ha activado ni una sola comisión negociadora que haya dado a conocer resultados positivos públicamente. Es ahí donde reside nuestra preocupación del tenor de cualquier materia que pudiere ser transferida. La letra y el espíritu del contenido del Estatuto. El cumplimiento del Estatuto no está en su agenda. No hay voluntad política ni institucional de cumplir el Estatuto, la única voluntad conocida es la de organizar una fiesta.
López no está defendiendo los intereses de Euskadi. El pasado día 24 de mayo convocó a las Diputaciones Forales y a EUDEL para analizar el “Plan de Ajuste económico.” Los representantes institucionales le pidieron la convocatoria urgente de la Comisión Mixta del Concierto. Han pasado dos meses y todavía no se ha reunido la Comisión.
Estas son las obligaciones ante las que debería de estar vigilante, las que suponen la defensa de los intereses de Euskadi.
El Lehendakari López se erige en vigilante del incumplimiento del Estatuto en lugar de velar por su cumplimiento.
No está cumpliendo con su cometido, no está representando su papel institucional. Ha tenido seis meses nuestra propuesta dormida en un cajón, ni nos ha respondido, y ahora que lo presentamos en Madrid en el contexto del debate del Estado de la nación y de una grave crisis económica, política e institucional, López reacciona y lo hace tarde y mal. Su obligación es vigilar el avance y desarrollo institucional de Euskadi, el progreso y profundización del autogobierno. Estos son los objetivos de nuestras propuestas, unos objetivos que debería hacer suyos y velar por su cumplimiento, en lugar de erigirse en vigilante de su incumplimiento y de aplaudir, probablemente, las enmiendas que sospecho que el Grupo socialista liderado por el diputado Madina vaya a oficializar en el Congreso de los Diputados a las Propuestas de Resolución presentadas por el Grupo Vasco EAJ-PNV.
Defensa de los intereses de Euskadi, respuesta a las necesidades de Euskadi, cumplimiento íntegro del Estatuto de Autonomía de Gernika, profundización y avance en el autogobierno vasco. Todo ello en el contexto socio-económico, político e institucional. Sin confundirnos con otras interpretaciones.
Por Iñigo Urkullu en su Blog
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