En 1.998 la Tregua de ETA finalizaba y con ella la ilusión de miles de vascos configurada en Lizarra.
A finales de ese años comienzan de nuevo los asesinatos y continuan en 1.999.
El lehendakari Ibarretxe debe acudir a numerosos funerales por toda la geografía española. Es recibido con insultos e intentos de agresión.
Son los momentos convulsos de la unión del PSOE y el PSE-EE con el PP.
Las cosas que por entonces estaban bien contra Ibarretxe y contra EAJ-PNV, pero centralizadas y personificadas en Ibarretxe ahora parecen estar masl personificadas en Zapatero.
El otro día en Lorca y ayer en Castellón se producen manifestaciones contra Pepiño Blanco y Rodriguez Zapatero en sus visitas a estos municipios.
Los medios de comunicación afines al gobierno español atacan y repudian estos actos contra la figura de un presidente de un gobierno democratico por el partido de la oposición.
Es decir, lo que ayer estaba bien hoy está mal.
Las varas de medir de doble rasero se aprecian cada vez más.
Estas acciones contra los dirigentes democráticos de las instituciones han sido alimentadas por Patxi López, secretario general de los socialistas bizkainos del PSE durante la época de Redondo, y Eguiguren, secretario general de los socialistas gipuzkoanos por aquel entonces. (Personas que no dimitieron y que no criticaron estas acciones en alto)
Ahora los malos son los que antes eran buenos.
Ya aprenderán, pero tarde.
A finales de ese años comienzan de nuevo los asesinatos y continuan en 1.999.
El lehendakari Ibarretxe debe acudir a numerosos funerales por toda la geografía española. Es recibido con insultos e intentos de agresión.
Son los momentos convulsos de la unión del PSOE y el PSE-EE con el PP.
Las cosas que por entonces estaban bien contra Ibarretxe y contra EAJ-PNV, pero centralizadas y personificadas en Ibarretxe ahora parecen estar masl personificadas en Zapatero.
El otro día en Lorca y ayer en Castellón se producen manifestaciones contra Pepiño Blanco y Rodriguez Zapatero en sus visitas a estos municipios.
Los medios de comunicación afines al gobierno español atacan y repudian estos actos contra la figura de un presidente de un gobierno democratico por el partido de la oposición.
Es decir, lo que ayer estaba bien hoy está mal.
Las varas de medir de doble rasero se aprecian cada vez más.
Estas acciones contra los dirigentes democráticos de las instituciones han sido alimentadas por Patxi López, secretario general de los socialistas bizkainos del PSE durante la época de Redondo, y Eguiguren, secretario general de los socialistas gipuzkoanos por aquel entonces. (Personas que no dimitieron y que no criticaron estas acciones en alto)
Ahora los malos son los que antes eran buenos.
Ya aprenderán, pero tarde.
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