Está claro que en cierta medida ha perdido CiU las elecciones.
Claro está, según como lo valoremos.
Por un lado CiU sigue siendo la primera fuerza política en Caralunya.
Y por el otro, pese al incremento de votos de ERC, esta no consigue acercarse a CiU.
Está claro que las fuerzas españolitas de Caralunya han visto culminado su techo electoral.
Unas elecciones muy polarizadas es lo que tiene.
Pese a todo creo que el gran perdedor es el PSC y el PSOE en general.
Perdieron en Galiza, perdieron en Euskadi y perdieron en España.
El único que debiera dimitir sería Rubalcaba y aquellos que le apoyaron en su día.
CiU no ha conseguido la mayoría absoluta pero ha ofrecido la voz al pueblo para que hablarán y decidieran.
Y de momento lo único claro es que las fuerzas soberanearas siguen siendo mayoría en el Parlament.
Veremos lo que sucede a partir de ahora.
Mas ha dicho que las decisiones según los resultados deben ser tomadas por más de un partido.
Ahora está por ver lo que decide ERC tras su experimento de izquierdas con el PSC. En aquel momento CiU también les propuso un pacto soberanista y prefirieron llevar a Catalunya a la ruina económica que CiU ha tenido que gestionar en solitario.
Veremos lo que pasa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario