Las empresas constructoras presionan a Zapatero y este sube la luz

La caida de la construcción de edificios no ha hecho mella en las grandes empresas dedicadas a este negocio.

Uno de los motivos es la diversificación de mercados en la que están adentrados:la gestión de autopistas y aeropuertos, el servicio de limpieza de varios municipios o el alquiler de los centros comerciales que construyen.

Varios son los encargadpos de estos menesteres: Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y de ACS, así como viejo conocido de Patxi López, es su rostro más conocido.

Junto a él, lideran el grupo herederos de históricas familias de la construcción como Esther Koplowitz (FCC), quien tiene en su consejo de administración al otrora secretario general de la sucursal vasca del PSOE, Nicolás Redondo Terreros.

Rafael del Pino (Ferrovial) y José Manuel Entrecanales (Acciona); históricos empresarios como Miguel Ángel Villar Mir (OHL) -ministro de Economía durante el franquismo y candidato en varias ocasiones a la presidencia del Real Madrid-, y un magnate de nuevo cuño forjado al calor de la burbuja inmobiliaria, Luis Rivero (Sacyr Vallehermoso),componen la lista.

Es probable que reconozcamos algunas de estas empresas en nuestros servicios de recogidas de basura, de jardineria o de practicamente cualquier servicio público.

Hace unos meses todas estas empresas iban a reubnirse con el presidente Zapatero para negociar varios asuntos pendientes pero tras llegar la noticia a varios medios de información, tuvo que ser desconvocada.

Y es que en dicha reunión se iban a tratar temas relacionados con contrataciones públicas y con los endeudamientos a los que se ven sometidos los ayuntamientos.

Y es que la obra pública mueve millones de euros y las empresas constructoras lo saben.

En caso de que Zapatero no aprobara que los ayuntamioentos pudieran endeudarse un poco más las construcoras deberían despedir a miles de trabajadores encargadas de los servicios públicos y las elecciones están a la vuelta de la esquina.

Mientras tanto y para intentar conseguir dinero público para poder costear dichas empresas el gobierno de Madrid ha decidido subir la luz ahora que se empieza a necesitar más debido a la prontitud con que anochece.

El gobierno de Madrid ha decido alzar el recibo de la luz un 4,8 % más pese a que los expertos avanzaban que con un 2% de subida sería suficiente.

Un gobierno socialista rendido a las empresas.